La autora de la famosa saga de libros
fantásticos ha sacado a la luz uno de los misterios que no llegaron a aclararse
en la historia: Harry Potter, al igual que el resto de sus compañeros en la
escuela, era un niño con serios problemas mentales y psicológicos. Por ese motivo fue llevado a Hogwarts, que en
realidad no era un colegio de magos, sino un centro donde cuidaban de gente
discapacitada haciéndoles vivir en un mundo compuesto por su imaginación.
“Era
algo que ya tenía en cuenta desde el principio, no esperaba que nadie
descubriera de primeras este significado, pero creo que ya era hora de que se
supiera” declaró Rowling en una entrevista. Aclara que Harry , desde que
era muy pequeño, tenía graves problemas, pero no quiso decir con detalle cuáles
exactamente, estos problemas venían acompañados de algún trauma infantil. Fue
abandonado por sus padres a una temprana edad, todavía tiene un vago recuerdo
de ellos, también recuerda con miedo a una persona con cara de serpiente que
sería Voldemort, nunca llegó a saberse quién era, pero era un trauma que había
acompañado a Harry desde siempre y tenía que combatirlo de alguna manera. El
Reformatorio Hogwarts siempre tuvo en el punto de mira a ese niño, pero sus tíos,
que se encargaron de su custodia, no veían con buenos ojos los métodos que
tenía ese centro, ya que utilizaban la imaginación de los niños y sus mayores
ilusiones para poder combatir sus miedos y poder conectar de alguna manera con
la realidad. Harry tiene recuerdos oscuros de los años que vivió con sus tíos,
ya que en realidad solo trataban de hacer que lleve una vida normal, pero el
niño siempre tenía la sensación de que le maltrataban, al igual que su primo
Dudley, quién solo quería ser su amigo y jugar con él. A la edad de once años,
sus tíos aceptaron a regañadientes las peticiones de Dumbledore, el director de
Hogwarts, y pagaron su matrícula en ese centro.
Hogwarts es representado como un castillo
enorme en el que los niños ven todo tipo de cosas imposibles y criaturas
mágicas, el objetivo es que aprendan a controlar sus pensamientos irreales. La
imaginación de todos los niños cambia cada año, por eso siempre ha habido una
amenaza distinta por curso. Toda la historia de Voldemort, los mortífagos y los
Horrocruxes fue un juego inventado por Dumbledore basándose en la imaginación
de Harry, la cuál fue conociendo más con el paso de los años, era todo un juego
para que lograra vencer sus miedos más profundos.
Pero no eran solo los miedos de una sola
persona, ya que todos sus compañeros del centro tenían algún tipo de problema,
y las amenazas inventadas eran una puesta en común de todos. Ronald Weasley era
un niño que provenía de una familia numerosa cuya morada se situaba en una
granja, estaba muy unido a todos sus hermanos, los cuales asistían al centro
para hacerle compañía y ayudarle, Hermione era una chica con mucha capacidad
para la adquisición de conocimientos, pero su mente le hacía sufrir
alucinaciones constantemente, de estas
siempre quería sacar una lógica, Neville Longbottom era el niño al que
más le costaba controlar toda su imaginación, ya que se volvía contra él
constantemente, por eso parecía tan torpe al principio, Draco Malfoy provenía
de una familia de clase alta cuyo padre quería cambiar el método de enseñanza,
por eso ansiaba hacerse con el centro. Todos los profesores eran profesionales
psicólogos y pedagogos que seguían la corriente a los niños y se inventaban
juegos y retos para las clases. Hagrid era un adulto con los mismos problemas
que el resto de los niños, pero nunca consiguió superar del todo su problema,
por eso le dejaban realizar tareas en el centro, aunque algunos padres como el de
Draco Malfoy no estaban de acuerdo con la idea de que un discapacitado
realizara tarbajos dentro de esa escuela.
J.K Rowling dice a todos los fans de la saga que no se alarmen, que esto seguirá siendo una saga fantástica que tanto
niños como adultos podrán disfrutar, no tienen porque pensar en esta revelación
cada vez que lean o vean Harry Potter, ya que el mundo mágico siempre servirá
para nutrir la imaginación.